domingo, 16 de agosto de 2009

El artículo del domingo: El patrimonio español

En fechas recientes se ha sabido de la detención de un expoliador del patrimonio español y algunos de Los Lectores Emboscados han preguntado sobre cuáles son los bienes culturales protegidos y cómo se defiende.


El patrimonio español


España es un país muy rico en patrimonio y desde las instituciones estatales y autonómicas hace muchos años que se está realizando un gran esfuerzo por identificar, catalogar y proteger cada uno de los bienes culturales que constituyen el Patrimonio Español.


La primera gran medida para la protección del patrimonio español es la aprobación de la Ley de Patrimonio en 1985 (ley 16/1985 de 25 de junio). Esta ley establece los criterios para la identificación de los bienes culturales así como las medidas para defenderlo.


En principio hay dos grandes tipologías de bienes culturales: los considerados muebles (“todos los que se puedan transportar de un punto a otro sin menoscabo de la cosa inmueble a que estén unidos”, según el artículo 335 del Código Civil) y los considerados inmuebles (monumentos, jardines históricos, conjuntos históricos, sitios históricos y zonas arqueológicas).


La Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales mantiene un Registro General de Bienes de interés Cultural y un Inventario General de Bienes Muebles en los que se recoge todo el patrimonio protegido por las Comunidades Autónomas y por el Estado, y que se puede consultar en sus bases de datos: Bienes Muebles, y Bienes Inmuebles.


Otra forma de clasificar los bienes culturales es en función del nivel de protección que reciben. En este caso hay dos grupos: los que están bajo el régimen general y los que están bajo los regímenes especiales.


Dentro del régimen general se encuentran el Patrimonio Histórico Español, el Inventario General de Bienes Muebles y los Bienes de Interés Cultural. Por su parte, dentro de los regímenes especiales son el Patrimonio Arqueológico, el Patrimonio Etnográfico, el Inventario de Bienes Muebles de la Iglesia Católica, el Patrimonio Documental y el Patrimonio Bibliográfico. Es precisamente dentro de las dos últimas subcategorías mencionadas en las que se encuentran los bienes de bibliotecas y archivos.


La difusión de los bienes culturales depende de varios factores, entre ellos, su naturaleza, la comunidad autónoma dentro de la que se encuentra y la institución de la que depende. Y aunque este entramado parece muy complicado, las medidas de difusión funcionan para gran parte del patrimonio protegido: bases de datos de bienes muebles e inmuebles, visitas arquitectónicas guiadas, museos, catálogos, y un largo etcétera.


En lo que parece claro que es necesario un nuevo enfoque es en la protección de patrimonio documental y bibliográfico, que ha sido objeto de atentados en los últimos tiempos. Los expertos barajan medidas como la revisión de los protocolos de identificación de los investigadores, la restricción al acceso de documentos originales y la digitalización, como las más adecuadas para proteger estos bienes culturales.


En total son miles los bienes muebles e inmuebles que están bajo la categoría de Patrimonio Español. Todo este patrimonio es mantenido con las medidas adecuadas, protegido bajo legislación específica, y aumentado con nuevas incorporaciones y adquisiciones.


Las principales instituciones relacionadas con el Patrimonio Histórico Español son:

Instituto del Patrimonio de España (IPCE).

Área de Patrimonio Histórico del Ministerio de Cultura.

Patrimonio Nacional.

La Red de Patrimonio Europeo HEREIN.